A las 16:30 horas levantamos ancla, y nos acercamos en menos de media hora al puerto de Stintino. Es una pequeña península, con dos puertos tipo “fiordo” a cada lado. Uno es pequeño y para barcas de pesca, Porto Minore; y el otro, Porto Mannu, es un marina privada que cala 2.5 metros. Como vamos con el Olyvia, nos amarramos en un pantalán, de reciente creación, junto al brazo de abrigo exterior. Un ormeggiatore de gomonne y camisa amarilla nos ayuda. Los amarres tienen agua, pero no tienen luz.

El propio marinero nos lleva en el gomonne a Porto Mannu. Stintino es un pueblo turístico y de vacaciones, y como atracción principal para visitar tiene un Museo del Tonno, donde explican como se instalaban las almadrabas, y en especial la del paso de Pelosa, que era la más grande de Cerdeña.

Manuel, Sara y Ruth se van en taxi a recoger a toda una tropa que llega desde Madrid, para unirse a nuestro viaje. Por un lado Montse, Rosa, Jorge y Luís. Por otro lado, para el Olyvia, llega Nico, el hijo de Ruth con el que ya viajamos el año pasado.

Montse y yo vamos a realizar el viaje en paralelo, por carretera, juntándonos con el Irenea cuando sea posible o nos convenga.

Así pues, este blog no se actualizará hasta el día 12 de julio, cuando todos, junto a Mateo, regresen a la península. Manuel y yo esperamos salir junto al Olyvia hacia el sur de la isla.

Iré actualizando las posiciones, para que quede constancia del viaje, pero sin mayores comentarios de navegación salvo cuando esté embarcado.